Minimiza Alcalá quejas vs contralorDescarta llamarlo a comparecer ante el Cabildo
Viridiana Lozano Ortíz
Blanca Alcalá minimizó las inconformidades de los regidores de su administración en torno al tortuguismo del contralor municipal, Mauro Uscanga Villalobos, descartando toda posibilidad de que éste pudiera ser relevado de su puesto o siquiera llamado a comparecer ante Cabildo.
Y es que regidores de todas las fracciones políticas han descalificado el trabajo de Uscanga Villalobos, puesto que a 18 meses de su gestión al frente de la Contraloría Municipal no ha reportado ningún avance significativo en los casos que se le han turnado, especialmente en aquellos que tienen que ver con faltas administrativas de funcionarios municipales.
El jueves, la regidora del PRI Guillermina Hernández Castro exigió a la presidenta municipal actuar en congruencia y sustituirlo por alguien capaz de resolver las denuncias que se han presentado ante dicha instancia.
Pese a dichas declaraciones, la alcaldesa sólo se concretó a declarar que esta dependencia seguirá actuando con base a los procedimientos que están establecidos en la norma vigente: “Debemos respetar los esquemas, pero siendo cuidadosos en todo lo que representan, a fin de evitar que se tomen acciones que no están contempladas en el marco de la legalidad.”
En tanto, la fracción de regidores panistas presentará en la próxima sesión de Cabildo un punto de acuerdo para la creación de un Consejo Ciudadano que se encargue de obligar a la Contraloría Municipal a actuar a favor de los ciudadanos y no del presidente municipal en turno.
Por su parte, los regidores del PRD y Panal, Jaime Cid Monjaraz y Beatriz Fuente Velasco, respectivamente, propusieron la modificación, a largo plazo de la Ley Orgánica y el Código Reglamentario Municipal (Coremun), para que en las siguientes administraciones la figura del contralor provenga de la ciudadanía y deje de ser un subordinado de los intereses políticos y partidistas del administrador en turno.
Blanca Alcalá minimizó las inconformidades de los regidores de su administración en torno al tortuguismo del contralor municipal, Mauro Uscanga Villalobos, descartando toda posibilidad de que éste pudiera ser relevado de su puesto o siquiera llamado a comparecer ante Cabildo.
Y es que regidores de todas las fracciones políticas han descalificado el trabajo de Uscanga Villalobos, puesto que a 18 meses de su gestión al frente de la Contraloría Municipal no ha reportado ningún avance significativo en los casos que se le han turnado, especialmente en aquellos que tienen que ver con faltas administrativas de funcionarios municipales.
El jueves, la regidora del PRI Guillermina Hernández Castro exigió a la presidenta municipal actuar en congruencia y sustituirlo por alguien capaz de resolver las denuncias que se han presentado ante dicha instancia.
Pese a dichas declaraciones, la alcaldesa sólo se concretó a declarar que esta dependencia seguirá actuando con base a los procedimientos que están establecidos en la norma vigente: “Debemos respetar los esquemas, pero siendo cuidadosos en todo lo que representan, a fin de evitar que se tomen acciones que no están contempladas en el marco de la legalidad.”
En tanto, la fracción de regidores panistas presentará en la próxima sesión de Cabildo un punto de acuerdo para la creación de un Consejo Ciudadano que se encargue de obligar a la Contraloría Municipal a actuar a favor de los ciudadanos y no del presidente municipal en turno.
Por su parte, los regidores del PRD y Panal, Jaime Cid Monjaraz y Beatriz Fuente Velasco, respectivamente, propusieron la modificación, a largo plazo de la Ley Orgánica y el Código Reglamentario Municipal (Coremun), para que en las siguientes administraciones la figura del contralor provenga de la ciudadanía y deje de ser un subordinado de los intereses políticos y partidistas del administrador en turno.
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