Los regidores del ayuntamiento de Puebla rechazaron entregarle un crédito a la empresa Industrias y Tecnologías de Oriente (ITO), actual concesionaria del rastro capitalino, a fin de que esta pudiera cumplir con su obligación de convertir al matadero municipal en Tipo Inspección Federal (TIF), esto a cinco meses de que se cumpla el plazo convenido para lograrlo.
Con el argumento de que sus finanzas han sido mermadas por la actual crisis económica, los representantes de la empresa justificaron la solicitud del préstamo a la Comuna argumentando insolvencia financiera amagando con la imposibilidad de cumplir con el contrato de concesión por 15 años si no recibían ese apoyo.
Así lo informó el regidor del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Jaime Cid Monjaráz, integrante de la Comisión de Ecología del Cabildo y participante en la reunión que se efectuó este lunes con los propietarios de ITO.
El crédito solicitado sería por 10 millones de pesos más, por lo que la conversión del actual rastro insalubre –según lo calificó la Secretaría de Salud del estado de Puebla hace un mes– a Tipo Inspección Federal ya no costaría 30 millones de pesos como fue convenido, sino 40.
La petición fue rechazada debido a que el ayuntamiento tendría que adquirir nuevos compromisos financieros, que tendrían que ser avalados por la Secretaría de Finanzas del estado, la cual no accedió.
El regidor perredista señaló que la actual operación del rastro municipal es insuficiente y carece de infraestructura para convertirlo a Tipo Inspección Federal, por lo que se debe abrir la posibilidad de buscar un espacio para construir uno nuevo, o bien, cambiar de concesionario.
Otras fuentes informaron que la reunión tuvo que ser convocada casi de manera urgente, pues este tema no podía quedarse detenido y espera a que las regidoras Isabel Ortiz Mantilla y María Eugenia Mena Sánchez, titulares de las comisiones de Ecología y Salud, respectivamente, regresaran de sus “viajes”, a pesar de que los regidores carecen de permisos vacacionales.
En la última reunión de estas comisiones unidas, a principios de mes, ambas mujeres argumentaron que no podrán seguir tratando el problema del rastro debido a que sus agendas “no coincidían”; la razón es porque ambas aprovecharon el periodo vacacional para ausentarse de sus tareas en el cabildo.
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